Cuándo la anomia es la ley.

28/06/2018 10:58 am

Pasaje Dardo Rocha La Plata, Argentina.

Hace más de 100 años las calles eran decoradas con carteles que comunicaban reglas de comportamiento. Bastaría verlo para saber que no debíamos hacer algo.

Pasados 116 años las conductas anomicas mandaron ese cartel a la historia y convirtieron en letra muerta las reglas de convivencias entre las personas. Desde las más pequeñas hasta las más peligrosas conductas pasaron a ser la nueva ley social.  Es muy difícil la convivencia cuando se generaliza la idea que uno puede hacer lo que se le ocurre sin medir los riesgos de daño al prójimo. Es casi imposible imaginar un futuro mejor si no aceptamos reglas de convivencia y solo nos importa la que queremos establecer a nuestro antojo. La anomia genera daños irreparables en las personas y el conjunto social. Solo tiene como beneficiarios a la criminalidad y condena a las comunidades a una prisión cultural con barrotes muy difíciles de romper. Cuando la anomia pasa a ser la ley que manda, el futuro de una vida pacífica y de mutuo respeto se nos escapa como el agua entre los dedos.